En el día actúa con el sol inyectándonos de vitalidad; durante la noche actúa con la luna expulsando impurezas. Con gran delicadeza, la piedra nos transmite su sabiduría y paz.
Gema de la sanación total. Ayuda con el insomnio y los trastornos de la piel. Produce calma, serenidad y equilibrio. Eleva los sentimientos espirituales. Ayuda a no tener miedo del tiempo ni de la vejez.